Para el día más importante de su vida, Máxima eligió un vestido de Edouard Vermeulen en tonos "nude" con cuerpo de escote drapeado, falda plateada y mangas abullonadas.
La reina Máxima llevó su pelo recogido en un moño bajo y su maquillaje fue discreto, mientras que sus tres hijas van idénticos trajes de color amarillo sin mangas y el pelo adornado con una diadema de flores en el mismo tono.
La ceremonia de jura:
Máxima dejó el vestido utilizado más temprano para lucir un vestido largo color azul cobalto, con un importante trabajo con transparencias y bordados en la parte superior y en la falda.
El diseñador a cargo del modelo fue el holandés Jan Taminiau. El vestido tiene una base de crepe e incorpora una capa de gasa. Las mangas son similares al trabajo de transparencias en el frente del vestido, aunque quedan ocultas bajo la capa.
Sus hijas y suegra, Beatriz, también vistieron prendas de la misma gama de colores.
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